Resumen
Hacer ejercicios no tiene porque evitar cuidar la piel, al contrario, seguir las recomendaciones necesarias puede ayudarte a crear una rutina de belleza acorde a la situación. Así se puede mantener la piel protegida ante cualquier posible problema derivado de la actividad física; por eso, a continuación te compartimos cómo cuidar tu rostro antes y después de ejercitarte.
¿Hacer ejercicio es malo para la piel?
Hacer ejercicio regularmente no es malo para la piel, de hecho, tiene varios beneficios. Durante el ejercicio, la sudoración contribuye a eliminación de las células muertas de la epidermis, suciedad e impurezas de la superficie de la piel, lo que provoca una exfoliación natural.
La sudoración abre los poros, lo que facilita la eliminación de toxinas y destapa los conductos de las glándulas sebáceas. Pero, se debe considerar que esto puede favorece la aparición del acné.
El aumento de la circulación sanguínea durante el ejercicio también ayuda a depurar de forma más efectiva las toxinas. Aunque, esto puede causar infecciones cutáneas y desmejorar el aspecto general de la piel al tener un resultado poco estético.
La práctica regular de ejercicio puede contrarrestar los efectos negativos de los radicales libres en la piel. Lo que ayuda a frenar los signos de envejecimiento, como arrugas, flacidez y manchas, y mejorar la textura y apariencia de la piel.
A pesar de que existen algunos detalles desfavorecedores, no hay que dejar de estar activo, ya que en líneas generales los ejercicios son favorecedores para la piel y la salud del cuerpo. Lo importante, es crear rutinas que ayuden a evitar esos posibles problemas que pueden derivarse de la actividad física.
Cuidar la piel antes de ejercitarse
Limpieza
Antes de realizar toda actividad física se debe cumplir con una limpieza facial acorde para facilitar su oxigenación. Sin embargo, debido a que durante este proceso la piel tiende a sudar y enrojecerse, se debe evitar el uso de limpiadores agresivos que puedan resecarla en exceso.
La mejor opción es utilizar una fórmula oleosa, como un bálsamo, un limpiador bifásico, un aceite o una leche, ya que además de limpiar, también hidratan la piel.
Ya sea que practiques deporte temprano en la mañana o al final del día, no es recomendable realizar ejercicio con la piel sin limpiar. Una piel limpia permitirá que la transpiración y la circulación sanguínea sean más efectivas, lo que a su vez contribuirá a una piel más saludable.
Una forma adicional de refrescar el cutis antes del entrenamiento es aplicar un poco de tónico. El tónico proporciona una rápida hidratación y nutrición a la piel, lo que la prepara para enfrentar la actividad física; se puede optar por un tónico suave y sin alcohol para evitar la irritación de la piel.
Hidratación
Es importante recordar que durante la actividad física, se puede perder parte del producto debido a la sudoración. Por lo que, es necesario asegurarse de que la piel esté adecuadamente hidratada antes de comenzar.
La hidratación previa al ejercicio ayudará a mantener la piel equilibrada y protegida, evitando la sequedad o la deshidratación durante ese proceso.
Se recomienda utilizar productos ligeros y de rápida absorción para evitar que la piel se sienta pesada o algo grasosa durante el ejercicio. Una opción es usar un tónico hidratante, seguido de una crema hidratante adecuada para tu tipo de piel.
Además, si planeas ejercitarte al aire libre, es fundamental aplicar y reaplicar protector solar en todas las áreas expuestas de tu cuerpo, incluyendo el rostro. Busca un producto de este tipo que sea resistente al agua para asegurarte de que se mantenga efectivo durante la sudoración.
Rutina de cuidado después del ejercicio
Limpieza
Lo primero es evitar limpiarse el sudor de la cara con las manos, ya que esto puede introducir bacterias y suciedad en los poros abiertos, lo que puede provocar a su vez brotes de acné. En su lugar, lleva una toalla de gimnasio limpia y utilízala para secarte la cara y el cuello a golpecitos, evitando frotar la piel.
Limpia el sudor del rostro lo antes posible después de hacer ejercicio para evitar que las bacterias causen problemas en la piel. Sin embargo, debido a que la piel está irritada después del ejercicio, es crucial evitar limpiadores agresivos que puedan resecarla o dañarla, así como ácidos, peeling, exfoliantes y alfahidroxiácidos.
En su lugar, se recomienda utilizar un aceite limpiador, leche o crema desmaquillante, agua micelar o una fórmula bifásica para retirar la grasa y la suciedad que el sudor haya dejado sobre la piel.
Después de la limpieza, se recomienda la exfoliación para asegurarse de que el sudor, la suciedad y la mugre persistente sean eliminados de la piel. Pero ten cuidado de no exfoliar en exceso, ya que el cutis puede estar sensible después del ejercicio; se recomienda hacer este paso máximo dos veces a la semana para evitar irritar la piel.
Hidratación
Después del entrenamiento la piel llega a perder humedad debido al sudor y la exposición al medio ambiente. Por lo tanto, es necesario utilizar una crema hidratante para ayudar a recuperar la hidratación y reparar la barrera hidrolipídica, que es una capa protectora natural de la piel.
Busca una crema hidratante acorde a las características de tu piel y aplícala suavemente en la cara y el cuello para nutrir la piel y mantenerla hidratada.
Además, no olvides proteger tu rostro del sol con un protector solar, siempre y cuando sea de día; la exposición al sol después del ejercicio puede incrementar el riesgo de daño solar. Por lo que, se recomienda aplicar un producto de amplio espectro con un factor de protección solar (FPS) adecuado para proteger tu piel de los dañinos rayos UV.
Independientemente de si prefieres una rutina de belleza para la piel más sencilla o más completa, se recomienda utilizar un suero facial posterior al entrenamiento. Este paso adicional ayuda a cubrir las necesidades que presenta la piel mientras proporciona hidratación adicional.
Si utilizaste un suero facial y crema hidratante antes del ejercicio, puedes continuar usando los mismos productos después del entrenamiento para tener tu rutina de belleza para la piel más consistente.